Liliana Varela, Patricia Ortiz, Norma Padra - Argentina

MASOQUISMO


"Latigaste dos veces mi espalda
hundiste tus garras
y clavaste tus pezuñas en la carne
que masoquistamente te ofrecí.

Tus codos hundieron costillas
laceraron músculos
rompieron huesos sin piedad.

Digitaste puñetazos,
puñales, trinchetas en la materia
dispuesta al sacrificio.

De rodillas, acepté,
me sodomicé
incomprensiblemente torné el llanto
en goce por ti.

Hoy puedo decir que siento el placer
de lo que irreparable fue...y ya no es.

Hoy tus manos vistieron de luces mi andar.

Salté la tapia gracias a tu empuje
al precipicio."


Lili



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El goce de la entrega
endulzó tus lágrimas
inundó tu cuerpo
de sensual aroma
-savia y sudor-
-dolor y placer-
alma en carne viva
hembra.



Patricia
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Éxtasis
En su espalda cada ondulación ponía de manifiesto la opulencia de sus
caderas.
Ella sonreía, su boca entreabierta era delicada y plena. Él se acercó a
aquellos hombros desnudos. Tuvo la tentación de tirar de su vestimenta y
dejar al descubierto sus pechos tensos bajo el raso. Lo hizo, y allí mismo
la tomó. Ella parecía sorprendida y dócil, cariñosa e invitadora. Sus dedos,
tan expertos y delicados como una araña tocaban los más escondidos lugares
en busca de una respuesta violenta.
Ella gimió, suplicó, gritó, aulló...
NORMY P.
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Albert Estrella Ureta, Perú

Buscando la llama de la tetera o de la lámpara
A florence Nightingle


Florence Nightingale alumbra con su lámpara
una herida que ya no está en Crimea
que más bien está en nuestras manos
en el centro mismo donde se irradia nuestro cuidado


Ayer
amanecimos; no con gotas de rocío
sino con gotas de suero…

7:00 am pasamos reporte
y nos encontramos a nosotros mismos
en los otros
aunque hoy estamos encerrados
como en el siglo pasado
en una jeringa descartable
y no salimos
por miedo a ser émbolos
no de aire, sino de vacío

Pero
yo te encuentro a ti dama de la lámpara
en esta misma hora del reporte
mientras tirito
no hubieses imaginado llegar hasta aquí
Cerro de Pasco, ni siquiera a este 8 de junio de 2007
que no es ni tu fecha de nacimiento, ni de tu muerte
sino más bien la fecha en que te enciendes
como una llama en una más de nuestras clases
mientras pasa el tiempo
como de una botella de suero
a la vena;
a veces a chorro
a veces a gotas.

Oh, Florence ¡
hoy sólo retiré unos puntos
y pasé triaje
además se me perdió un lapicero
mas ha vuelto a renacer una llama
como de fósforo…

Yo sé que en esa llama estás tú
aunque a veces encienda un cigarro
con otro fuego, con otro fósforo
y no me cuide a mi mismo.

Hoy
muchos irónicamente le llaman tetera
a tu lámpara (entre ellos yo mismo)
pero yo sé que tú hubieras comprendido
porque todos andamos con la herida sangrando
y sin cerrar
y a veces hablamos por la herida
por eso herimos

Hoy en esta clase
quisiera sentarme al final
sacarme los lentes
y cerrar los ojos (que es casi lo mismo)
y sentir
lo que técnicamente llamamos
aplicación de medios físicos
o en palabras de poeta
el calor que viene de tus manos
de tu lámpara (tetera)
y de uno mismo…

LAURA ISABEL LUGONES / Ramallo / Argentina

Soy el río

soy rumor que delata el andar presente
esperanza de espuma turbia que acaricia el oro
y la inconmensurable calma que asombra la luna.

soy ese espejo que al tiempo contempla
que ofrece a tanto misterio un vientre
y se despliega socavando vétigo.

-anidan en mi seno un ritual de voces que se agitan hechizadas-

mírame
embriágate
cuando te desnudes y hagas el duelo
descúbreme...soy éxtasis que espera.

Fanny G Jaretón, Argentina

A-PARICIÓN

A la poesía hay que llevarla a la cama
acostarla
para agotarle todos sus deseos.
Hacerla poner de rodillas
frente al amor
A la poesía
hay que incubarle
el silencio de la noche.
Decirle lo que pasa cuando el alma está apagada.
Susurrarle lo que la mente dice cuando se agota.
Arremeterle con las palabras que se nos hacen invisibles.
A la poesía
hay que martillarla
contra la piedra filosofal.
Abrirla de piernas
que coceé hasta que quede herida
contra el alambrado que ajuste sus instintos.
Hay que desabitarla de lenguaje ostentoso
sacarle a su Rey
la orgía de sus cortesanas.
Tirarle la jauría encima
que se muera de miedo
que se contagie de rabia.
A la poesía hay que golpearle la espalda
dejarla sin palabras
cuando el Poeta verdadero sabe
solicito hurga explora
que para parirla sólo hace falta Verbodicción.

CHELO, Argentina

Los manchados Plateados


Ruego a nuestras intuiciones no vuelvan a entrelazarse.
Vamos de nuevo perdiendo el control, como escapándonos.
Vamos de nuevo y nada queremos descubrir
ni saber de la presencia sin temor y ángeles en colores.

Lúgubre fiebre en la frente, carne viva.
Vapor de tu cruz dada vuelta
vierte de pie tu piel que soy yo, vos mis poros.

Venial es faltarle respeto a las horas
la toalla arrojada no es toalla, fue orgullo.

Hace rato
abandonamos corteza y huesos
ganas de vernos son pétalos, vertidos
en ánforas del deseo.

Qué tarde para idolatrarnos, qué tarde.

Hemos creado un idioma.
Hemos engañado a las mascaras del yelmo que tienen las noches sin dormir.
Nos volvimos brillo vertido de pie
dejando una mancha
plateados en el suelo volvemos / y vuelves / y vuelvo.

Mario Gualter Correa Arambulo

Carretero de Alzaprima

Sobre las nucas de bueyes
Van rodando las carretas
Al son de las sinfonías
Del chirriar de las ruedas

Y un carretero que arre
Que arre, arre y sueña
Porque el sol se está poniendo
Y su dueña ya le espera

El rejón en una mano
En la otra la picana
Aguijonea sus bueyes
Va cruzando la picada

Llevando enorme rollo
Bajo su entraña de hierro
Un lapacho admirable
Que solo alzan los fieros

¡Oh, carretero!
Que sueña y sueña
Que arre y arre
Que apura la marcha
Porque se hace tarde

Patricia Corrales, Argentina

Clandestinos


La noche continúa insistiendo.
Vuelves a buscarme en la clandestinidad
de una esquina.
Separas mis piernas suavemente,
las separas con la furia del tiempo fugaz.
Poseída por tus labios que llevan el calor de lo prohibido
me abrazo a tu imagen etérea y misteriosa.
Nada quiero saber de ti más que de tu cuerpo
encima de mi destino.

La moneda tiene dos caras como la vida misma

OSVALDO NORBERTO LAZARO

cuerpos se abren en dos
destilan veneno, solos
como espacios estancados

luz que se mueve
sin fin
pero no hace nada

el poeta se arrodilla
sobre el hiriente paraíso
que lo circunda

¡Oh filosofo incompleto!
tu pronostico loco
ha vaciado la lluvia
la impiedad

la ánfora congelada
turbando
lentitudes
avanza

El afecto es la añoranza
de los condenados
que esperan
…………………siempre esperan…siempre

PORFIRIO MAMANI / PERÚ/ FRANCIA

La Sombra

La sombra en la sombra camina:
busca su hueco, su figura, su cuerpo.
Todos la miran, la espían con ojos transparentes;
la huyen y la buscan entre muros y desechos.
Suena un río, y en el río la sombra se detiene,
mira su rostro arrugado por la noche.
Ellos están ahí, siguiendo la sombra y su reflejo.
Unos van por la hierba, otros por el agua.
La sombra y el hombre son una huella:
habitan el tiempo y el olvido.
Todos gravan con esfuerzo su nombre.
Cansada la sombra cruza el calmado río,
lava sus atuendos en la orilla que buscaba.
Seca su rostro con ásperas arenas.
Ellos la miran y no le dicen nada,
ni gestos ni ruidos le procuran,
sólo quieren que se aleje,
entre la orilla y la niebla,
para comer tranquilos.
¿De quién será la sombra que allá camina?,
murmuran el viento y las hojas.
Ellos la huyen, la esquivan,
la empujan y la jalan por el nefasto día.
En el silencio de la noche
hay un camino que guarda los recuerdos;
otro, la sombras y los sueños.
Queda el tiempo y los restos
que dejando va la sombra en el camino:
una huella, un grito, un sueño.

LUIS ALBERTO GARCIA, Argentina

fronteras

mi mundo,
tiene tu forma y tus fronteras,
perdido en el limes de tu sensual imperio
vago sin rumbo
sin poder hallar el inexistente afuera
que me libere
de tu
reinado atroz
de emperatriz omnipotente
avasallante........ egoísta........ cruel
adorada........amada
deseada....deseada.....deseada

JUAN POMPONIO, Argentina

LAMPARA


El erótico jugo

apenas se desliza.

No se ve,

corre entre tus muslos,

cae en el suelo

dibuja la forma de tus sueños:

levanta vuelo una mariposa manchada.

Lleva parte de tu sangre.

Se mezcla en la noche,

se pierde entre pasillos:

Noche de una sola luna colgada del techo

como lámpara antigua.

Pero no lo es.

Es el jugo del cielo.

Y transforma el destino.

Gabriel Impaglione - Italia/ Argentina

gabriel impaglione: Explicación del imperialismo

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Hoy a las 12:32
Con todos los panes que no parten
ni comparten los niños de la tierra
hacen un misil los asesinos.
Lo estallan luego contra cualquier pobre
país lleno de hambre.
Después lo ocupan
tiran de los hilos del surco
destejiéndole el futuro
y le sorben la tierra
hasta lo más hondo.
Con las ganancias botan
un nuevo acorazado
para llevar en sus cañones
más libertad a los hambrientos

M. J. ROMERO, Asturias, España

Escribir /

Para ser menos dolor y no morirme todavía
para no estar callada siempre
para que todos los insectos de mis fobias salgan
a oscurecerse y me oscurezcan
un poquito más
para que tú me leas y no me preguntes

porque cuando escribo no soy de nadie ni de nada
ni tan siquiera soy
porque sé que detrás de las palabras hay alguien
escuchando y no siempre eres tú
no siempre eres tú el centro de mi universo
considerándonos.

ROCÍO L'AMAR / Chile

no dejas de frotarme
y ese versito es una vorágine un convoy que campanea temprano

podré ver las tres sílabas de tu nombre atravesando puertas
la mía
tiene facha de tejado tobogán deslizadero
cada otoño como éste sonrío así destornillándome
el refunfuño descabalgándome la ninfa mi ondina esa náyade

sibila
no canta
ni en árboles ni en la ciudad abajo

las palabras resultan foráneas
ausentumbre le dicen en medio de encrucijadas
donde se tensan y giran impúdicas raíces en virutas

como una exhalación rota una inhalación que raja

abierta
abanicada
y no importa si ves o no cada centímetro de mi abdomen
si ves o no el primer trozo de himen ni siquiera las once manchas
los huesos que nunca tuve para contemplarme

como quien contempla una bolsita de hachís

haciendo zumbidos dramatúrgicos porque inhumé órganos reales

desde el aplomo hasta el lenguaje plural

cómo contradecirte a este lado de la página

cuando mojas el dedo y frotas y frotas frotándome.

Virgilio Pellegrini / Canadá - Uruguay

Para Mario


Para marcharte
elegiste un domingo
sin marcar la tarjeta
ni pedirle algún jefe
que te diera permiso
con las tiendas cerradas
por las calles vacías
esta puta tristeza
pregonando tu muerte
casi como al descuido
Tu ciudad ¡
esta misma ,que supiste cantarle
tantos versos
tu vida ¡
cuando aun se manchaban
con azules de tinta
tus dedos y tu alma
pintando la rutina
Hoy se aprieta y tirita
y te llora bajito
una triste garua
que perfuma el cemento
ahora ya
sin tus huellas…….
con aromas de verso

ANA MARÍA MANCEDA, Argentina

CUANDO UN POETA MUERE

A Mario Benedetti


el poeta es una estrella, nos ilumina
nos hace transitar por el cosmos
del pensamiento
de las geografías más sutiles
de los amores inmortales
de las injusticias humanas
del valor, la amistad, la familia
y de la eternidad.

cuando un poeta se muere, su luz
seguirá viajando
como lo hacen las estrellas
aún muertas.


cuando un poeta muere, su energía
se expanderá con
la energía del universo, sus palabras.
quedarán como polvo cósmico en
nuestras almas, en nuestro idioma,
en nuestra vida.
entonces, el poeta no habrá muerto
ha trascendido.

ALEJANDRO CABROL / Entre Ríos, Argentina

Rayuela

Diez pasos separan la tierra del cielo.
Zapatos infantes que aun no imaginan
angustias terrenas hacia azules vagos,
y sin darse cuenta, con el tiempo olvidan.

Diez ciclos de tiza, diez fogosos meses
de sueños de cántaros rondando la fuente.
¡Qué poco! Y no importa tanto sacrificio
pues sembraron vida de a dos en un vientre.

Permutar seis días por domingos propios
ausentes de ocio, amarga revancha;
diez lustros de espera a nítidas metas
que corporizadas, al sueño no cuadran.

Diez remedios caros para achaques crónicos
llevándose amigos al hueco cavado.
Un bastón, dos lentes y toda la nieve
del mundo a las sienes, nos traen los años.

Diez nietos fastidian hasta divertir
a chochos abuelos, repletos de tiempo,
mientras saltan felices veredas porque
diez pasos separan la tierra del cielo.

Susana Cattaneo, Buenos Aires, Argentina

hay una casa en mi mano

Hay una casa en mi mano donde un hogar a leña abriga la ternura. La alfombra sostiene dos cuerpos desnudos que celebran vida.
La casa en mi mano tiene el tamaño del océano y por sus paredes brotan bosques que ocultan.
Un horizonte de barro se ve por sus ventanas.
El cazador la descubre. Bella en la mira de su rifle. Bella en su finita eternidad. Certera la bala en el centro del vivir.

Hay una casa en mi mano, destruída, intacta, como el amor roto. Como el destino.

HUGO PATUTO, PERGAMINO, Argentina

BAJO LA FORMA DEL SILENCIO

Esa otra voz de una mirada
ese fuego que palpita y calla.

Creer en alas renaciendo a cada momento
y del paso suelto quitar
una idea que remite a un nombre, al viento.
Esa otra voz
como si toda ella fuera sol
en los ojos abiertos de la nueva mañana;
creer
que cobran vida las náyades junto al incienso
y que la lluvia aleja del sendero.

Aún a orillas del sueño
la pasión vale por la quietud del fuego,
cuando lo terreno y lo celestial comulgan
y se empeñan en acercarse al alma.


(Publicado por diario “El Norte”de San Nicolás el 11-04-82

Alberto Luis Ponzo, Argentina

............NADA

............................lo primero es una nada (rien),
............................... ..la nada ( néant)…
.................................. ...Jean Tortel

Un fragmento dócil
roto en medio de
lo impreciso

así es la poesía

el lugar abandonado
la luz borrada en el vacío
el ser solo en el grito
para nadie

la total sombra que deshizo
el suelo donde hubo una voz
y dejó caer lo nombrado

así es la poesía

hasta que llegan las palabras
cuerpos de la nada

llaman detrás de no saber

nacen de mundos ignorados

así es la poesía

Esteban Charpentier, Argentina

Oh, qué será, qué será.



Alguien te dice buen día, en que puedo ayudarte en mi barrio perdido
Te abre la puerta de mi auto pero elige su música,
te paga los cigarrillos para decirte que no fumes más nuestro amor o sus resabios
Alguien te da mi mano para caminar y cruzar las avenidas
Te lleva por la mitad de la calle y se pone enfrente por si llegan a atropellarlos
Alguien le da mi moneda a un chico que le limpia un vidrio
deja de comprar los jazmines que yo te regalaba los martes
se hace la señal de la cruz frente a los campanarios
Alguien te pide que vayas a mi casa a buscar unos libros y te hace pasar hasta mi biblioteca y lee lo que subrayé yo
Alguien pasea mi perro, le cambia el nombre sin confundirlo
Le niega mis atajos
Alguien con el pretexto de rememorar mis sueños te acerca mi boca a tus labios cómodos aletargados
Seca mis lágrimas desde un recuerdo
y alcanza tu espalda con mis brazos de aire
Alguien que usa mi ropa y mis zapatos nuevos se hamaca en el sillón de mi escritorio
Parece balancear mis pesados prejuicios mis displaceres y convencimientos
Dice que vale la pena mi vida y acerca nuevamente su oreja a tu cuello
Alguien se esmera en decirme, citarme pero critica mi almohada su altura sus hipotecas
Mi forma de dejarte la memoria incandescente la sonrisa bailarina
Alguien me traiciona seis veces, se suicida en mi lugar
Desentierra mi lacerado cuerpo y ocupa su puesto
Alguien que no soy yo ni lo que era
Será recordado por lo que fui y tal vez se lo merezca

Gabriela Fiandesio, Rosario, Argentina

POEMA AL OLVIDO DE TU NOMBRE

Como la estrella azul de medianoche
Como el murciélago que ronda mi ventana.

Detesto la soledad de astros
Detesto mi vida de paria.

Como el azul poniente de este dia
Como la esquirla que atravesó mi conciencia

Desarmo y rearmo rompecabezas
Con las piezas de este olvido tan olvidado.

Como la quietud con la que te mueves
Como el flequillo de tu inocencia

Marco a fuego la incongruencia de tu nombre
En el efímero lienzo de la vida.

Como quimeras de un nuevo eclipse
Como agua salada que baña estas playas

Mi cuerpo te nombra apocalíptico
Y mi cordura se desvanece en estas líneas.

Como poeta que enamorado se halla
Como papel que a la pluma ama

Soy testigo del nacimiento
De versos ciegos para tus ojos claros.

IRIS VILLAMIZAR, Caracas, Venezuela

Ella escribe un poema
cuando sus labios los sellan
con hilos de sangre
ella escribe un poema
cuando desea un abrazo
y se encuentra
en una isla de sabanas
ella escribe un poema
cuando después de danzar
sobre un cuerpo
escucha un susurro
que contesta una llamada
a medianoche
ella escribe un poema
aunque él no cubra
su rostro
para cortar
con el filo
de la indiferencia
su respiración

***************


Cuerpo que le cuesta amar
Cuerpo que no comprende
el amor a primera vista
sino tal vez al pasar los días
cuerpo que obedece
sólo a sus normas de vida
ante una risa continua y violenta
cuerpo afín a la soledad
recreado al insomnio
prepara la huida
para no aumentar sentimientos
cuerpo atraído por preferencias
luego recurre a las apariencias
cuerpo de condición altiva
oculta otro cuerpo
que se entrega por dinero
ya que no ocupa lugar
divide el tiempo y lava
de culpa sus manos

MONICA ANGELINO, Buenos Aires, Argentina

Hay en todo / un fondo oscuro / una búsqueda / un encuentro / una partida / con mayúscula y minúscula / esas ganas de una misma / un oscuro fondo oscuro / y la poesía / un mamut / blanqueando / en la espesura.

Blog: poesiafondoscuro.blogspot.com

KEREME

Kereme así kon k de loka y kola
Kereme kon la voka de b de vaka larga
Kereme Kerosene y kereme aunke te keme
kereme y te modelo un kero kon mis manos
kereme si me kedo kijote sin kimeras
Kereme aunke parezka ke a veces no he krecido
kereme kon kemosis y kereme kon keilitis
kereme ke este mundo tiene visos de kermesse
kereme Ke este siglo sigue siendo kambalache
Kereme ke me asustan los kukos de la bolsa
kereme aún si hay dengue y nos venden una gripe (pobres chanchos)
kereme así manteka piantada derretida komo estoy dale che
kereme
kereme sin palabras ke el agua está muy fría
Kereme ke otra vez estoy muy triste
Kereme y no te kulpo
si te mueres.

Norma Marchetti, Argentina

Sola en mí…Norma Marchetti
Sola en mí… sola en mis tiempos,
vaciándome en minutos madrugadas,
dejándome sumir en alas rotas,
asiéndome al fervor por las palabras.

La esfera que me enfunda me acorrala,
el juego del valor me hace añicos,
el frío se me instala en los intentos,
volviendo a desafiarme en los inicios.

Sola en mí… sola en estrofas,
en este ocre otoño y deshojado,
jugando con el viento entre crujidos,
viajando en remolino hacia el pasado.

Sola en mí… en mis intentos,
en las álgidas mañanas de este Mayo,
que me desluce los ensayos entre grises
y le agrega un descanso acurrucado.

Sola en mí… en los desplantes,
con mi frente erguida en los afectos,
con el alma desnuda de franqueza
y mis sueños escondidos en el pecho.

Mariano Shifman, Buenos Aires, Argentina

PESSOA PERSIGUE SU VERDADERO NOMBRE

...... “A vida é como si me batessem com ela”.
......................Bernardo Soares

A ti, a ti que en un solo barro engendras
la obediente silla de ruedas truncas
para el hijo de tu minuto fatal
y las tremendas manos obstinadas
en la aventura de calzarte nueva máscara
y los fortuitos dictámenes de los naufragios
y las piedras preciosas del que ha herido
y cada una de tus ominosas zancadillas
y cada una de mis ominosas caídas

A ti, a ti astilladamente inquiero
escribiéndote sin correcciones

................... escrupuloso aprendiz.

Nilda Pigazzini, Argentina

LA NOCHE

En ese momento
de la noche
Cuando el espanto asoma
la locura asume el silencio .

Absorta la tarde va dejando
Solo ... unas huellas

Invoco la plenitud
del último momento
la vida impulsa de pasión
el vuelo …
La noche oscurece…

La nostalgia desborda
sobre la ingenua
primavera .

Valeria Duque, Brasil

Nunca es tarde
Los sentidos se atropellan sobre
una verdad que escurre
salpicada de torpor
es como si el alma volara
hacia las estrellas
para ahogarse en sus bocas
dormitando cálculos despavoridos
en cada dádiva un verso
de esquina
en cada dolor
mil historias inacabadas
nunca es tarde
para el pan adormecido

18 - 05 - 2009

Senén Rodríguez Perini, Uruguay/España

Se venden en buen estado,
muy cuidados,
silla de ruedas eléctrica con comando a derecha,
batería con cargador, 40 horas de autonomía,
ruedas antipinchazos.
(Se reía, le gustaba, se sentía libre)
Andador de aluminio especial
con agarraderas antideslizantes.
(Nunca pudo andar segura)
Grúa para elevar pacientes prácticamente sin uso
(Ella la odiaba)
Cama articulada eléctrica
con colchón antiéscaras
(Le daba mucho calor y se enojaba)
Mesa de noche tipo sanatorio
con luz de resistencia variable
(¡Como le gustaba quedar de noche a media luz!).
Arco de protección para las piernas
(Recuerdo que decía sentirse como
una india en su carpa)
y nada más de cosas materiales
que otro pueda precisar, por unidad
o separado a precio sumamente bajos.
- Mi situcion económica
no me permite regalarlos -
Eso si,
me quedo con su sonrisa,
sus ojos profundos y tristes,
sus jazmines en flor en el patio,
su risa inolvidable,
sus recuerdos,
mis recuerdos,
el dolor por no tenerla,
y la alegría
porque sé que ya no sufre más,
ella que era pura vida,
que ya no sufre,
no sufre más.

Jimena Arnolfi, Entre Ríos, Argentina

me quité los dioses despacito
me quité los dioses despacito
me estaban molestando los pies
de tanto desmentirme en las manos
ahora antes de morder la duda
la declaro culpable,
espero y la separo en sílabas,
la deformo hasta dejarla sin ganas
pequeños infiernos se desarman en mi boca
y empiezo a criarlos
con la paciencia del que no entiende
mejor me dejo un dios para más tarde

********

payana
estoy imaginando que todavía puedo decir algo,
en voz baja deletreo los próximos pasos,
nunca puedo verme mientras me voy
mientras tanto miro por la ventana:
un otoño se revuelca entre hojas caídas,
está jugando a la payana
con todo lo que había olvidado







*********

entretanto
yo tenía un dolor de cuerpo prematuro,
se me iba la voz en medio de una parálisis,
bastaba la tos fuerte de mi mamá
para que se enloquecieran los latidos
entretanto la vida insiste,
se encapricha de antojos que salvan,
que bastan para que uno grite
la pucha, que vale la pena estar vivo/ y es verdad,
son esas cartas bajo la manga
que te hacen entender el miedo como pretexto,
no hay más que quiera decirte,
yo me sobresalto rápido, pero estoy bien,
recordé que hay que matar a los padres de chiquitos,
toda la infancia del mundo es huérfana,
tiene frío y nadie la cuida,
el pormenor del mal menor
después se tira a una subasta de culpas
a veces no quiero decir nada,
ni siquiera la estupidez que es necesaria,
disfruto dedicando ese silencio cuando es perverso,
todavía duermo la siesta y tengo pesadillas
tengo que sobrevivir a las caricaturas de un dios
que me enseñaron

Teódulo López Meléndez, Venezuela

ALIENACIÓN ITINERANTE
(1972)
Yo he ido caminando lentamente
dejando pedazos de mi ser material en cada esquina.
Yo vine para ser un testigo con alma de emigrante
Yo llegué para enseñar a mi lengua
el dolor de las manzanas.
Soy esa expresión de tristeza
que ninguna época sabe
y es el signo de todas las épocas.
Ese espacio vital que sentenciamos
y sólo descubrimos nuevamente
al exhumar cadáveres de jóvenes muertos.
Cubierta de las ciudades de ceniza
que nos oculta los cráteres enmohecidos
y nos hace elevarnos en fumarolas de humo
y rugir nuevamente como volcanes iracundos.
Un barco que navega círculos
en las cuevas de los cascos en tinieblas.
Un aullido en silencio
sobre los sordos pedestales y los escaparates desvencijados.
Una sombra de pergamino que repite entre las sombras
el eco insostenido de sus ruidos:
"En los caballos gitanos de la aurora
abandoné el dolor universal de los olivos"

Alejandro Cabrol Paraná, Entre Ríos - Argentina

Altar y bóvedas

la vida borra tu imagen
en las márgenes vivas
de mi letargo

un duende irónico
y desvelado
trae sombras perfumadas
con horas pares

¿impacto mi tacto en tu recuerdo
o los dedos se ahuecan sonrojados?

la noche pide bajar…
de qué sirven tan arriba
azules vagos

y sufrir:
¡que vergüenza!
-la necesidad-
porque el dolor no…

lo oscuro busca tu imagen
y dibuja con saliva
el beso impago

cómo cruzo
este aplazo
del último gusto
a rojo vivo y paladar…
en esta endeble canoa
aguas arriba
cómo hago ahora
dime cómo

(silencio largo)


Oh tú
altar y bóvedas moradas

Luis Pereira / Uruguay

De una mujer azul


De una mujer azul se aguardan fraguas de herrería días de guardar herencias de mampostería
cabalgatas infames indecencias
de una mujer azul celebraciones cangrejos arroyos de aguas estuáricas días de pasión generalizada
de una mujer azul se esperan días rojos ojos de
quinientos canales ensayos que nada saben acerca de mujeres azules
de una mujer azul se espera que ignore la ternura la violencia de las siete de la tarde en la calle paysandú o camino a aiguá por la ruta doce o tras el cerro san antonio al oeste de la península que separa las aguas oceánicas de las que no lo son
una mujer azul no dejará que el olvido se haga cargo no dejará de enviarte cartas manuscritas postales otoñales con leyendas al borde de lo cursi
¿traicionaría una mujer azul a uno que la quiso?
¿le dejaría de escribir cartas manuscritas dando cuenta del olvido narrando esas circunstancias?
¿volvería una mujer azul a retornarte cartas de amor pulseras inciensos ofrendas para la diosa del mar?
recortes furiosos recortes de la furia fotos de actrices famosas de la tele poetisas folletines apuntes de ignotas puestas en escena collares la crueldad agazapada en sacerdotisas volvería una mujer azul solo para maldecirte eso las distingue quizá

Mario García – Montevideo, Uruguay

TIEMPO

A mi valiente madre soltera

se la llevó el invierno
con su cortejo de escarcha viento
su pobre cajón de madera
un triste cristo llorando
una docena de claveles rojos
tres autos por las calles
fui entonces hasta su viejo
reloj de pared
le di cuerda
y amorosamente
está suspendida en el tiempo.

Ana Buquet, Montevideo, Uruguay

El juego, el fuego

Disfrutan del juego.
Entrelazan sus piernas.
Se abrazan.
Olvidan el mundo.
En ellos
no existe más
que un “nosotros”.
Se huelen - Se besan
El ríe.
Ella goza de su risa.
Se aman
incansablemente.
Se palpan.
Las luces apagadas.
Suave la música de fondo.
Estalla su guerra.
Gozan.
Profundamente
gozan.
Como humanos
sienten.
Con instinto animal
se buscan
una y otra vez.
Estalla su paz.
No recuerdan cómo fueron.
Cuánto hace que no son.
Sólo saben del hoy.
Olvidan que son viejos.

Héctor Cobas, Miramar, Argentina

SENSACIONES SUBLIMADAS
Un rayo de luna se posó en mi retina
similar a las hebras de plata que penden
como imaginarias guirnaldas de algún dios anónimo.
El rumor incesante de las olas se grabó en mis oídos,
como un vibrante sonido punzante
en la inmensidad de la noche y
la suave arena se deslizó entre mis dedos,
creando una aureola amarillenta
semejante al aro del sol de un mortecino atardecer.
Mis pies se hundieron en las ondulantes aguas
del tumultuoso vaivén de las olas y las pletóricas
sensaciones se aunaron en un solitario haz
que sublimaron el breve espacio de tiempo que duraron
en poema eterno a la vida.

Ana Lucía Montoya, Colombia

Sigo en Mínimos



él llora y canta.
lobreguez del poeta
es verbo mudo

ella es la dama Ausencia
que se ensaña silente

entre la bruma
llamando al sol de día,
calla la noche

no dice lo que siente
el hambre de piel habla

maná ofrecía
un romero del valle
que cantó amores

no escuchó más su canto
porque murió de pena

RENAN ALVAREZ, Trujillo, Perú

Poema XVII
Y doy mi brazo sin torcer la marcha;
se forma la existencia en unidad:
ya somos dos a que no se resignan
a vivir solos: el uno del otro.

Dócilmente llueve esteras de barro
formando cobijas de ábaco y tiempo,
que sirven en su adiestrada y rutina
limosnera, inocencia en nosocomio.

Que fina membrana alborota y excluye
sorbos de olvido, y sueña la mañana
en el claxon de un autobús despierto.

En la cruz de pobre, ronda la vida
en la iglesia cercano al vecindario:
la suerte echada en los dados fuleros.

Ramón Emilio Darío Martínez Acosta, Santo Domingo

Sueños de día

No te conozco,
no me has visto,
y te sueño.

Eres el cielo,
y un lago yo,
el horizonte,
somos los dos.

Discusiones,
juntos abría,
que abrasados,
terminaría.

Es la fantasía,
sueños de día,
lo que seria.
(io)

Juan Cruz Bordoy, Argentina


LA VIDA.
(26/2/2009)

Eres una carrera llena de sentimientos y obstáculos
que se pierden en la escalera del recuerdo.
Vida que te escurres entre los días y semanas,
sal del laberinto de la luz y la libertad.
Te esperaré. Si no vuelves iré y te ayudaré
a pasar entre la muerte. De su fría casa.
Por favor despierta de tu sueño, ayuda a aquellos
que no se los ve corretear por el bosque.
Tu eres una pieza del mundo. Desearía que volvieras
a jugar con aquellas flores que esperan tu felicidad.
Siempre me acompañas, y tus ojos de azabache juguetean
con un sonajero que vuela por las nubes que no lloraron.
No quiero que tus sentimientos escapen de ti. Si lo hacen,
intentaré atraparlos. Luego, encerrarlos en tu corazón.
Yo te cobijaré para que las estrellas no te miren aquella inocencia.
Espero que la tristeza nunca te anide.

Jorge Humberto, Covina, Portugal

Poema de una madrugada

Por entre las sombras silenciosas de los árboles
el rocío esparce sus gotas.
El primero en cantar de los
pájaros despiertos, anuncia una lleve brisa que se levanta
por detrás
de la línea de las aguas del río, trayendo atrás de sí
un frío invisible
y la niebla que va descendiendo hasta al suelo,
formando una capa opaca, en medio de la floresta.


Agrupados, con sus ojos grandes
y rojos, los animales buscan el calor deseado
mientras esperan que desde el horizonte se asome
el tan esperado día y su inmenso sol, cubriendo todos los cantos,
robándoles el letargo, ansiosos por correr
libremente por entre las hierbas blandas.


Sólo a los pájaros habituados al frío,
desde bien tempranito, su canto,
bellas melodías, va dejando,
de aldea en aldea, de calle en calle,
en su llamar persistente, simple forma de reconocimiento.


Sombras de gatos hambrientos, buscan
el camino conocido para sus cacerías.
ya a lo lejos,
los primeros naranjas y amarillos se muestran,
explotando en la línea del horizonte,
resueltos a conquistar, más de una mañana
de nueva vida, que va despertando aquí y allí, como en una sonrisa.


Abro la ventana, para acercarme a los primeros rayos de sol,
y encantado permanezco, al ver a los animales en sus dominios
y más allá los jardines, que me llenan los ojos y el alma con una nueva flor,
tras la furia de la madrugada.



03/05/09

Xiomara Rivas, Venezuela

Ven
tengo un trabajo para ti
recolectemos la vid
apilemos la mies
Dancemos con la transparencia
de la esperanza
Que el cantor eleve su canto infinito
que la flauta prosiga
su espaciado giro.
Ocupemos terreno
matemos al Dingo


............





Si yo pudiera meter una moneda
en el matero de mis violetas africanas
y así cambiar sus colores y esencias
que alivio...¡
si así se pudieran cambiar las cosas
como cambian los lobos sus pieles a ovejas
como los hipócritas clamas a sus afines
en la T.V.
y los miserables estimulados por la fama
y la fácil reconvención de sus pecados
sonríen convencidos
Gama ecléctica
de la ilicitud de su sonrisa
Tipos de sospechosos genes
Pobre país lleno de tentaciones lícitas
de rostros inhóspitos..cansados iracundos
Fresca esperanza
merodeada por lobos....

Xiomara Rivas, Venezuela

De su libro: AVE IRREVERENTE




La partogénesis de mi alma
me tomó desprevenida....
Horadé los cauces sin profundizar
Baudelaire con sus dulces
flores del mal
Tanhaunser dividido entre lo profano
y sagrado.
Vertientes de grilletes subjetivos
manía por la recurrencia del presente
Constelación añorada
burda construcción intelectual
Objetos que palpan el desvanecimiento
de las emociones
Individualismo rabioso
verdades que pueden recomponerse
mediante un simulacro o un collage
cosas de la vida
País finisecular carcoma profundo
que crea túneles internos
Visión de largo aliento árido
sin sentido de memoria histórica
Presente perpetuo y recursivo
eterno reciclaje
Ya ni se oye el silencio
ni se ve el aire
se cierran las compuertas
Avanza el siglo
nos asomamos curiosos a la ventana
Oteamos figuras olores sensaciones
Fin de siglo....

ELSA TENCA MARIANI, Buenos Aires, Argentina

BRUMARIO

Casas suspendidas
cuartos-navíos
ojos interiores
secretos
mecidos por luz.

Ropajes nómadas
ríos de la memoria
transitan
en la bruma de Valpo.

Aire
coihues callados
navegan
conciencias clandestinas
interrogan
................................

Lámparas de tempestad
buscan su centro
en el "Espejo de Cronos"

con centauros y heroínas
nadan en el polvo cósmico

A-
......Z-
............U-
...................L-

Presagian

la Belleza.

---------------A: Andrea Goic--

Carlos Barbarito, Argentina

Ahora que todo sucedió, ¿dónde..?


But what his mother was returns and cries on his breast.
Wallace Stevens, World Without Peculiarity..


Ahora que todo sucedió, ¿dónde
reencontrarla que no sea abajo y en lo oscuro?
Hablo y pregunto hacia el vasto dominio subterráneo,
responde por ella el consuelo,
que vale menos que una hoja seca, una rama seca;
¿cómo pensarla ahora, cómo asumir
esta hora que sobrevino a la hora desnuda y ciega,
cuando todavía hay quien augura resurrección
bajo bandadas que extravían su rumbo
y se precipitan? ¿Dónde
para ella el alimento prometido,
fulgente y constelado, el andar veloz,
sin tutela, hasta el mar primero,
el idioma último, su anchura, aliento y médula?
Lo sé, soy humano y todo se volvió remoto,
inhumano, por más que me prodigue
hay una flamante y desconocida especie
que, por frío y abandono, no me justifica;
¿qué acude en este momento a peinarla,
a salvarla del rocío, el hambre?
Imagino: recién llegó y tiembla,
no sabe todavía ni deletrear
eso nuevo que la acoge, pliegue
dentro de pliegue, vibración incesante que reposa;
¿qué es este abril que concluye,
que no me trae como antes oro en espejo,
breve calor que se adormece
a salvo de compás y atributo,
por qué debo ahora cargar con aceite
las lámparas para que iluminen,
respirar para no ahogarme,
girar la llave para que se abra la puerta?

Carlos Barbarito
(Abril 27, Mayo 1, 2009)

Ana Buquet, Montevideo, Uruguay

Mayo 1, 2009
vuelapluma nocturno


CÓMO DECIRTE


Cómo decirte cómo
que de tu piel en mí
no queda nada.
Nada para tocar
nada que me toque
nada de nada.

Cómo decirte cómo
que de tí en mi cuerpo
ya no hay rastros,
porque te fuiste
pero seguís estando
reiterando un tinte gris
tan reiterado.

Cómo decirte cómo
que tu voz y mi voz
son disonancias,
que no tienen las mismas partituras
el coro en que cantan nuestros ángeles

Cómo decirte cómo
que nunca más te quiero cerca
que no vengas a mi lado
porque moriste aquel día
despiadado y loco,
tan hueco y tan brutal
en que me dejaste
sola - sola- sola

Mayo 2009 Vuelapluma Nocturno

Juan José Mestre, Argentina

Podrán decir que soy un soñador, pero no soy el único.
John Lennon

---

Provocar la metáfora y que el grito solapado sea oído. Hacer de las palabras mares de vida que en lo hondo lleven elegías escritas en algas. Inventar sueños y esperanzas que sabemos, no tendrán eco. Escribir a la paz para que nos respondan con guerras. Decir, una y mil veces, que nuestra vida sí importa. Que nuestros niños son iguales a los otros. Y nos contesten con una hambruna. Vociferar-¡porque lo merece, carajo!- que, como poetas, no permitiremos que nos roben la belleza, nuestra herramienta de trabajo. Invocar a los dioses aún a sabiendas de que nos responderán con demonios. Vociferar y que se enteren de que la palabra es nuestra, mientras suyo es el ruido sordo de las balas. Que pongan las barbas en remojo, que al final los venceremos. Pues una simple pluma puede más que todos ellos. Bramar ríos de vocablos que lleven correntadas de palomas, que substituyan a los halcones. Desdecir a la geopolítica fratricida con la pureza de unos versos bien escritos. Levantar banderas de palabras que sean aptas para abatir a las banderolas de piratas. E intentarán acallarnos, veremos cómo derrumban nuestros sueños; pensaremos que somos locos, pero sólo por tiempo limitado: nosotros tenemos el fuego primigenio. Los pobres, los parias, los descastados, los exiliados, los mártires, los hambreados, los pulverizados y los poetas. Saber que el verbo sirve para la pelea. Que desde él se atizarán brasas de aquel fuego que surgió con el mundo que no es de ellos. Para que no nos silencien y vuelvan a sus madrigueras. Con la testa bien doblada.
---
"Podrán decir que soy un soñador, pero no soy el único."


SUSANA RODRIGUES TUEGOLS, Argentina

A VECES LAS PALABRAS…

A veces las palabras
hacen viajes monótonos,
anonadan las almas
con flechas que disparan
versos envenenados
de placer o de odio.

Cuando abrazan al verbo
que emite una armonía
es cual cita imprevista
de las letras sombrías
o las voces de luces
que interiores se agitan.

Las palabras perecen
lastimadas de espanto
cuando el orgullo tonto
genera un retroceso
hacia la cofradía
de terribles susurros
en agónico canto.

MORUS GOMEZ, México

Montes y montañas, encuentran su eco,
tu cuerpo se encuentra, muy cerca del mío,
tu aliento arrasa todos los sentido,
envolviendo en llamas, tu cuerpo y el mío.

Cuevas y cavernas, marcan las entrañas
que paciente esperan sentir tu latido,
cavando entre piernas, buscas esmeraldas
a cambio encuentras un cielo muy mío.

Besos ardientes, labios concedidos
la entrega seduce, dos cuerpos encendidos
gemidos y jadeos, todo recorrido
no tardes, sin ti hace frio.

Diana Bracamonte, Argentina

Y qué
si se dilatan,
tus pupilas
al verme desnudarme
en aquel río.
Y qué,
si tus manos
se te crispan,
por perderme,
desnuda entre
las sombras.
Me perdiste.

por meterte,
en ese abismo
de locura,
de mentira.
de estrabismo.
Yo,
sin ropas.
Tu,
sin bríos.

RAQUEL TEPPICH, Mar del Plata

Sin lágrimas
Arribó a este planeta con luces doradas,
ilusiones que no se concretaron.
Bebió placeres y malgastó momentos
hasta menospreciar la vida.
Amó con toda garra
y recogió traiciones.
Esparció semillas de ilusiones
y estas fueron infecundas.
Tus lágrimas formaron
un río hondo sin escape.
Saltaste al vacío
desafiando el regalo de Dios,
este excusó tu vanidad
otorgándote una segunda vez.
Abriste tus ojos sin noción
del tiempo transcurrido,
enjugaste muchas
lágrimas de arrepentimiento.

© Kellypocharaquel.-

Julia del Prado, Perú

Vivero de los sueños

No ves acaso hermana
la mano de la madre
que en alegorías de lápiz
nos hace conocer
la no sacra comedia de la vida
con su fantasía de escondites

No ves acaso hermana
la mano de la madre
que señala con vehemencia
este espacio redondo
-mapa de la Tierra-
en la que todavía los seres
hacen su océano
cuando el viento copula
con la mar en misterio
de sol capitán redondo
y luna compartida.

Héctor Cobas, Miramar, Argentina

SENSACIONES


Miro atentamente el mar y descubro el maravilloso mundo de las sensaciones. Los tonos cambiantes que van del azul intenso de vértigo incesante de olas matizadas de espuma blanco y el agonizante parpadeo del oro que refleja el sol del atardecer. Escucho el sonoro aullido del mar que asemeja al OM sagrado de los Upánisad, pronunciado por un cosmos que revela su origen esencialmente divino. Huelo el incesante olor que viene de sus profundidades con sus vidas agitadas en constante movimiento y no dejo de apreciar la humedad de sus aguas que estremecen mi piel cuando me sumerjo en su placentera playa. Y en ese incesante ir y venir de las olas que ondulan, con loco frenesí que devienen de la manifestación sensible de algún dios desconocido, me instalan silenciosamente en el misterio profundo del ser y de la vida.

SILVIA LOUSTOU, MAR DEL PLATA, Argentina

VIII

a la hora justa
se quitará
la sed / los vestidos / la ilusiones
y
se dormirá
pero su sueño correrá por los tejados
murmurando amor violentamente .

Claudio Piermarini, Tucumán, Argentina

Andrea

Ya sé,amor,
que en un momento cualquiera
moriremos,
porque el misterio,
que hoy nos da el latido,
es apenas un hilo delgado.
Y sé,
que por más
que hondamente lo indaguemos,
nunca sabremos
a dónde dan las puertas de la muerte.

Pero, ¿acaso no es bello estar aquí,
acariciando entre tus piernas
tu boca secreta,
mientras alzo tu pollera
y tus párpados se caen ?




Tribunales populares

¿El día del juicio,
podrá Dios redimirse
con haber sacrificado un Hijo?





"Un cuento contado por un idiota"

Todas las monedas de nuestro amor
cayeron cruz.
Si vos amanecías,
sobre mí llovia
el cántaro de la noche.
Causa y efecto fueron un velo,
que escondía un designio monstruoso,
un dios sin ojos y sin luz
que, con mala fortuna,
gobierna el mundo.

Todos los pétalos de la rosa
desparramados en el viento,
todo lo que busques
para perderlo.
Siempre Julieta se equivoca
y en su tragedia de enredos,
sin comprender la trama,
se suicida a destiempo.





Pecado original

Un dios al que nacemos debiendo
no es un buen dios.
Es un Banco Universal de la Desgracia.






Caminos de mierda

Con fusil y con flor,
partimos buscando
en mañanas desnudas
como hornos,
detener las ruedas aceitadas
del karma implacable;
dormir las perras de la Historia
una larga siesta en Acuario,
sin calvario y sin coroneles.
Sin fusil y sin flor,
de uno en uno
caimos sangrando
en la panza del Diablo,
envenenando la simiente
y pudriendo la siega,
como niños desconcertados,
que despiertan, para siempre,
a un alba de bayonetas
o túneles y pesadillas.
El ángel del Mal
echó suertes en su oficina.
Para algunos, entonces,
fueron tumbas
las arenas voraces del Orden,
el gusano sistemático, perfecto
del martirio,
y a los otros, cadenas perpetuas
en cuchitriles del espíritu,
totem-televisores,
cenizas de la libido,
largas, muchas, rutinarias
rayas de cocaína,
piedras frìas desmenuzando
esos jóvenes corazones viejos.

Como estrellas finales,
todos ardimos invocando
manos, huesos, cabelleras,
no significantes nombres
de profetas muertos
amados en vano.
Llorando, inútilmente, debajo
de un sordo,
mudo
y ciego
póster en llamas.





Rosas en el viento

Cosita,
que me dejaste
atormentado en el Eclipse
y un hueco en el alma,
como la bomba en Hiroshima,
rosa perdida en el laberinto,
no voy a cantarte,
borracho de tango en el abismo,
las metáforas negras
del rencor y del olvido.
Ni quiero hablarte aquí
del viento de la pena en torbellino,
que me muerde
por las calles de tu barrio.
Fresca, como una mañana entre los álamos,
voy a cantarte una canción sencilla,
que sólo diga cosas así:
me hiciste feliz,
lloramos y reímos
al amparo de los bares
y, temblando en tu balcón
la luna roja,
me diste en la penumbra
lo mejor que tenías.
¿Qué más puedo pedir?

Que tengas buenos vientos
en los mares de la vida
y en la curva impredecible de las olas,
de nuevo te traigan hasta mí,
giradas las ruedas de la Rosa.



A Hegel

También anda Dios,
enamorado en tu red,
Divina Maya.
Nadando con nosotros
en el río de los vivos.

Norma Padra, Argentina

LAPIDACIÓN


La máscara del miedo
espanta
el salvaje viaje
por el vientre de la tierra
calcinada.
Líneas sinuosas dibujadas
por lavas agrietadas.
El hombre horada los surcos
cava grutas
descifrando en la oscuridad
la piedra que lo embriaga.
Lapidación.
Caras de clivaje
fragmentos de cristal
en sus manos
está el diamante
escondido
que acepta su derrota.

HUGO PATUTO, Pergamino, Argentina

PIELAGO DISTANTE



Sabe que la noche tiembla en la garganta
(sabe pero ajusta el silencio
con hambre de luces y caracoles).
Dirá “estoy a salvo en la rutina
como las pantallas de un satélite”
y querrá blindarse, hundir
sus naves en el centro de la espera
desde lo inanimado
para saltar con los otros.

ISAIAS NOBEL, Argentina


Revelación


Seres de tiempo
Tornasoles que ascienden
Girantes, girantes espirales de luz
Universos de soles
Y galaxias enteras
Torbellinos y calma sideral,
Y silencio,
Viviente es el silencio allí
No hay antes ni después
Pero todo sucede
Ellos son eso
Seres de tiempo y luz
Nada hay más allá
Del tiempo fuera del tiempo nada hay
Cómo podrán verse
Desde fuera del tiempo
Esos seres de tiempo
Quiénes son, quiénes somos
Deslumbramiento
Deslumbramiento
Y luego naves infinitas desplegadas
Eternamente desplegadas
Oh en la inmensidad oscuridad azul
Pero el azul es también tiempo
Todo es variación,
Modulación del tiempo
Infinita música monumental.

Imagina
El Universo
Atravesado en toda su extensión
Por la Torre Infinita del Tiempo
Que es en sí profundamente animada vida.

Una torre, el Universo,
Sólo tiempo y luz y animada vida,
Nosotros, todos, Seres de tiempo,
Al fin.



No moriré

Entregaré mis ojos a la hermana del sueño
abriré suavemente la puerta de mi cuerpo
a mis seres queridos sonreiré en silencio
miraré en derredor recordándolo todo
olvidaré el dolor
convocaré a los Guías
pediré mi garrocha
y sin apresurarme
cerraré suavemente la puerta de mi cuerpo
y me pondré en camino.

Carla Striker, Venezuela

Inquisición

Este poema busca asesinar
un decálogo de conceptos anteriores.
Este poema llego para matar
los poemas que se graficaban de colores.
Llegó para inventariar vanguardias
como una inquisición a la resignación.

BEATRIZ ARIAS, Argentina

Cómo se vuelve del arco violeta de la hora detenida
del tiempo que rodó en el mar como un gigante de oro
y la mesa fija
y la niña de hielo fija.
La ciudad se despierta por sus ojos de piedra
por el hombre que derrumba su futura orquesta de cenizas
por el amanecer limpio que derrama su garganta de niños
por los nombres antiguos de los muertos, por la vejez descalza
y el pan escaso amasado en el recuerdo amarillo de la espiga.
Cómo se vuelve del centro metálico del llanto
de los gritos altos, de las tormentas, que nos dejaron vacíos y lejanos.


ARGENTINA

ANA MARÍA MANCEDA

*ABANICOS DEL OLVIDO.*SAN MARTÍN DE LOS ANDES. ARGENTINA



Noche y las sombras de las hojas de los árboles
nocturnos. Abanicos fantasmas refrescando amores
en las puertas de los zaguanes.
El aire del trópico, la música caribeña de la
radio se expande en los recuerdos. Día, feria,
olores de verduras y frutas. La humedad y el calor se
adhieren a la eterna piel de la juventud que iluminará
todas las primavera por venir. Risas. Puerto y tango.
Melancolía. Sonido vibrante. Amores, locos amores.
Crepúsculo ¿Ocaso? ¡ Qué importa!
La noche me espera con las sombras de las hojas
de los árboles nocturnos. Fantasmas. Hay un zaguán
largo, muy largo, se oyen suspiros y un suave aliento.
Y cientos de abanicos deslumbrados ,olvidando amores.

Alvaro Ancona

Desde México, poetisa sobre la gripe porcina

Te amo aunque tengas virus H1N1 y cubras tus labios con tapabocas quirúrgicos
y a pesar de que la Organización Mundial de la Salud prohíba nuestro amor.
Te quiero aunque no haya clases y los antros estén cerrados
y a pesar de que el gobierno haya declarado los besos y las caricias ilegales.
Te deseo aunque nuestras influenzas sean compatibles genéticamente
y a pesar de los cercos sanitarios que las autoridades han tendido entre nosotros.
Te seguiré amando aunque la epidemia de nuestro amor se convierta en pandemia
y se disemine por el mundo y a pesar de los más sofisticados antibióticos.
El germen de nuestro amor es tan poderoso que traspasará
cualquier frontera para estallar en un gran estornudo de siete colores.

Idea Vilariño

SI MURIERA ESTA NOCHE...

Si muriera esta noche
si pudiera morir
si me muriera
si este coito feroz
interminable
peleado y sin clemencia
abrazo sin piedad
beso sin tregua
alcanzara su colmo y se aflojara
si ahora mismo
si ahora
entornando los ojos me muriera
sintiera que ya está
que ya el afán cesó
y la luz ya no fuera un haz de espadas
y el aire ya no fuera un haz de espadas
y el dolor de los otros y el amor y vivir
y todo ya no fuera un haz de espadas
y acabara conmigo
para mí
para siempre
y que ya no doliera
y que ya no doliera.

JUAN POMPONIO, Argentina

DESDE LOS INICIOS
El humo del silencio se eleva
hacia la emoción póstuma.
No hay sonidos
tampoco silencios.
Sólo un sencillo arrullo
de pestañas ilusionadas
que refrescan la pasión
arrebatada por imágenes sagradas.
Una metáfora busca su refugio
camina entre tu sangre libre
navega por arterias rítmicas
te buscan sin respiro ni pausa.
Tal vez el milagro del amor
pueda elevar la plegaria
de conquista y disolver
tu alma abandonada.

Miguel Sánchez

deja marcas al pasar
es más aun que la primavera
me pido un rastreador avezado
que localice a ese enardecido

por si hay que limarle los cantos
desovar sus impurezas líricas
ponerle en fin una quilla
con alguna vía de agua

deja dislates al empalago
su ardor con bordes oleosos
atrae a diversos insectos
en un microclima sospechoso.


MSQ (MIGUEL)

NORMA MARCHETTI, Argentina

Surcando el misterio

Me deshojo en letras, revelo misterios,
varada entre rostros enfundo mis sueños.
Navego en las noches ancladas al tiempo,
como audaz cometa surcando el misterio.

Melodías brotan bosquejando versos,
mis manos escoltan algunos comienzos.
Sobre flores blancas, vocales se expresan,
junto a los rosales, brotan madreselvas.

Aroma de azahares sobre tinta fresca,
fileteando trazos, perfumando esquelas.
Mi voz en renglones, se torna velada,
y expone sentidos que oculta mi alma.

En mis venas yacen poemas vehementes,
desandando vida desde mí presente.
Mis dedos se expresan, me quitan la carga,
esbozan orquídeas esperando el alba.

22/04/09

Valeria Duque, Brasil

Sin saber
Poner dudas
en todas las certezas
vaciar la nada
llenar de susurros
el reflejo que se descubre
callado, sin voz
después
sobre resultado desconecto
contestar el oráculo
que despeja sus alas
y se arrastra
cazando palabras desintegradas
sobre páginas de un rocío
enmudecido

27 - 04 - 2009

Ana Muela Sopeña, España

MI MAR SABE DE HERIDAS
*
Las algas se deslizan por mis manos
amantes de caricias,
en la raíz del agua primigenia.

Tu música abandona los sentidos
entre mis dedos suaves,
con la piel imantada por estrellas
y niños que persiguen otra luz.

Mi mar sabe de heridas
en el cuerpo de la otra realidad.

Tu luna va envolviéndome en las cuevas
con sogas de memorias infinitas.