TERESA VACCARO






BARAJAR Y DAR DE NUEVO  

 

Mujer que callas y añoras;

en tu ventana no hay más lágrimas.

Las aves no te traen noticias

ni el viento te susurra al oído.

Tu espalda sostiene lo que no pudo ser.

El horizonte se vuelve un muro inmóvil.

 

Callas y preguntas:

¿si el pasado es presente     

dónde podré anidar?

 

Lejos permanece la vida.

No en tu casa,

no en tu mundo.

 

¿Qué luna mediterránea derribará el muro?

¿Quién podrá convencerte que la esperanza existe?
¿Cuál será el arco iris que te aguarda?

 

¿Cuáles las cartas para

barajar

y dar de nuevo?

 

DESTINO

 

Cada silla de mi casa espera,

una nube, un trueno, la lluvia.

Imagina barro en los adoquines,

algún mendigo durmiendo

en un umbral cualquiera bajo la cruz del sur.

 

Las sillas de mi casa

juegan a las cartas para pasar la tarde,

devanan lana para hacer el tejido

mientras se cuentan viejos secretos familiares.

 

Cada silla de mi casa

tiene deseos guardados:

encontrar la llave del tesoro,

la moneda en la fuente,

la sal de la vida.

Un eslabón que la enlace al destino.

 

DONDE LA VIDA LLAME

 

Persigo un lugar

donde purificar la tristeza.

 

Un universo.

Un territorio.

Una colmena,

donde saciar el hambre

 

Donde no se oculte la luz,

donde la vida llame.