Te abriré las puertas
Te abriré las puertas de mi pecho
para que te jactes de tenerme,
para que clames que el poseerme
te da de injuriarme algún derecho.
Mi corazón te siente maltrecho
y anda tras de su dueño; que el verme
en tal situación solo ofenderme
consigue en mi bienestar deshecho.
Ausente confías que no agravas
el mal que en mí torpe has producido,
y al herirme consciente te alabas
sabiéndote en todo complacido.
Tu huella en mi piel incesante grabas,
aunque no has tocado ni sentido
su tacto; bien que mi sufrir trabas
al soñarte en mi lecho encendido.