Desnudarte, mujer,
es forjar corazones con los cisnes
que emergen de tus senos
y hacen cabriolas en el céfiro.
Delinear cada trazo
de tus curvas.
Sencilla y dulce esmeralda;
sonrojada y tierna manzana;
tórrida y taciturna guitarra.
Desnudarte, mujer…
Sensualidad y belleza.
El abecedario del poeta.
La cúspide y su estrella.
Desnudarte, mujer…
Aterciopelada rosa.
Hay pájaros fucsias
que volatizan en torno a tus piernas.
y se elevan
por la cuesta crepuscular de tu vientre de mariposa.
Desnudarte, mujer…
Volar en el plumaje de mirlo
de tu pubis.
Sonrojar al cosmos con tu aurora.
Abrir la luna con su espejo
e iluminarla a cualquier hora.
Desnudarte, mujer…
Cincelar en mis pupilas tu figura