Náufraga...
A veces siento que soy náufraga
de una barca destrozada.
Soy sólo una mujer flotando
en la inmensidad del océano...
Y el abismo es una invitación a lo desconocido.
Son días en los que me hundo en la incoherencia,
esperando algún rescate con un poco de cordura.
¿Cuál es el camino?, -me pregunto.
Afuera todo es silencio,
miedo e inseguridad,
sin firmamento...sin estrellas.
Oigo el estruendo de un cometa
que se estrella en el mar...
sin viento
sin señales ...
Cuando te invoco pidiendo una señal
me ahogo en los acertijos y quedo muda.
Lo raro ... es que mi alma aún no se ha ido,
sigue aquí ... junto a mi.
¿Sabes porqué ?
Mi alma sigue firme...
almacenando esperanzas.