aire
la calle es tu boca desafiante
una niña que golpea el día
moja de verde esta mañana
huérfana entre basura oscura,
no conocí la lluvia ni sus pasos
desgasto tu piel mirándotela
trazo temblores en insomnio
soy un vidrio sobre las palabras,
alguien caerá en este vacio
alguien mas será niebla viva
un ojo en la guerra del amor
todo es miedo en la alegría.
solo muere la sangre al partir
el latido desmayado roto
mira el muelle del gemido
ignora lo que se persigue
un ataúd sin dueño es el final,
me pesa la mirada que atrasa
el reloj que persigo y lloro
quiero multiplicar a Dios
amordazar las manchas
sobre el sonido del misterio