A veces me desvisto, me visto, me atropello,
me caigo en la cuenta del banco al portador,
sueño que soy un hilo de coser mañanitas,
me vuelvo rojo globo que se pincha en el cielo,
me arrojo en el desvelo del ojo de la aguja,
desnuco crisantemos con palos de amasar,
hago nido en incendios para no sentir frío,
soy río, soy estepa, meseta alcanforada,
me hundo en la hondonada de la nada más fértil,
disfrazo de payaso a mi otro yo y sigo,
me desnudo, me abrigo, atropello a un camello,
me abrazo a mi señora que llora por mi culpa,
como pulpa de pulpo
y me agarra gastritis,
como lomo de plomo
y vomito un poquito, como luna rellena
y me agarra una pena muy honda
y me hundo en el mundo
disparando disparates en verso,
me río de la estepa que se trepa a mi espalda,
me río con Mafalda, con Olmedo, con Tato,
paso un rato conmigo y otro rato con ella,
hago un gol, lo festejo,
me meto en el espejo y me voy al carajo.