Esa aguja fría del silencio
Lo que me hiere de ti
no son las dentelladas en seco
que incendian verbos de agónicas quimeras
derriban los muros de mi celda
y le arrancan mudos acordes a mi queja.
Lo que en verdad me hiere de ti
es esa aguja fría de silencio
que me clavas sádica en los ojos
cuando escondes al aliento las palabras.