Lucy Martínez Zuzunaga


¡NO TE VAYAS!

 

¿Qué hiciste hermano?,

 por la luz meridiana

 emprendiste el vuelo intempestivo,

 te soltaste de este mundo

 pasando por el túnel certero

 donde desafiaste al tiempo

 desde tu lecho temprano.

 

¿Qué hiciste hermano?

 te dejaste seducir por ángeles bellos

 que con dulces besos te llevaron

 por la inmensidad del cielo

 y deslizando por las nubes

 tus años primavera

 convertiste en eterno sueño.

 

¿Qué hiciste hermano?

 te fuiste de este mundo

 con tu sonrisa joven,

sin las palabras dichas

 sin tu mirada de miel

ni el abrazo de ternura

 en los escasos encuentros

que hoy empiezo a extrañar.

 

¡Qué hiciste hermano!

 que un vacío infinito quiebra

 la tormenta que tu ausencia

 hace lluvia en el corazón,

un lento, interminable crepúsculo

se hace luto, dolor, no hay calma

 e ingresan por la fisura de mi alma.

 

¡Qué hiciste hermano!

 ¡No te vayas!, ¡detente!

 ¡quédate aquí, no te alejes!

 ¡necesito gritar cuanto te amo!;

hermano,

no te vayas.