Emilio MEDINA MUÑOZ – ESPAÑA

Las fases de la luna

La Luna ebria de amores
porque su Sol la derrite,
alza su rostro y compite
sin producirse dolores,
que se vuelve en tornasoles
con brillar de las estrellas,
y mengua como doncella
abrasadita de amores.
En menguante se ha tornado
y recorriendo su espacio,
va morando en su palacio
acabando en su menguado.
Desaparece a la vista
y en nueva Luna se crece,
aumenta cuando amanece
mostrando ya su sonrisa.
Llegando a la cumbre incierta
donde el Sol amante mira,
en ella, su amor se admira
y en sus brazos, yace muerta.