EL GATO ESPANTÓ A LA MUSA
Un gato negro pisotea mis papeles,
sabe que no estoy inspirada,
le cedo mi reinado.
Un gato negro pasea su cola por mi frente,
timón de mi barco a la deriva.
Este gato intuye
que mi musa,
salió de vacaciones,
permito su sesión de hipnosis.
El gato negro,
mira hacia mi interior a través de mis gafas,
advierte que no es mi momento,
se cuela por las ventanas de mi pensamiento,
abierto.
El gato negro,
clava sus pupilas afiladas en mi boca,
sospecha que la musa voló,
¡gritaré!