Ambrella Meyud

Flagelo



Noche plasmada, ni un viento ni un sudor.
Día de salto en salto, deja un estilo.
¡Ah, cuando sepan que has desafiado la ley de gravedad!
Culpa prevalece sino respiras espigas.
De ahí la dicha maravilla que dichosa pintas en vigía.
Hacen falta estallidos para sangrar,
como sangran las paredes.
Una pared se crea
porque las paredes fueron hechas para derrumbarse.
Un derrumbe trae materia prima para crear.
Una estatua se ha esculpido para ser eterna.
¡Es tan transparente y no lo ves!
¡Cruel, silueta cruel!
Eres una mancha salpicada cual quien se masturba al
amanecer sin ganas.
Ya no existe bálsamo que suavice tu agonía.
Y pretendes romper cristales cuando están heridos.
Y pretendes hamacarte sin suspiro.
Y pretendes ahondar en lo ya ahondado.
Y pretendes acabar en placeres fugados.
Y pretendes el llanto en lágrimas laxas.
Y pretendes tener furias deshechas.
Y pretendes amor en lujuria instantánea.
Y pretendes el odio cuando es divino.
(Odiar también es divino).
Y pretendes reglar cuando las reglas fueron dictadas.
Y pretendes ansiar cuando la ansiedad te ha regalado las ganas.
Y pretendes creerte que las maravillas del mundo son siete,
y solo es una “ La Naturaleza”.
Y pretendes todo pretendes…
Hay quienes dibujan en color peltre sin pasar
por la gama de colores blancos y grises.
Solamente llevan puesta la capa de la parka cuando nacen.
Y se retiran sucumbidos.
Así son.
Una mochila pesa mas que muchas, cuando pulcra
pero saben detenerse.
Secretos miserables y ricos de falencias.
Las almas lloran cuando mesen un rincón sucio.
Y tú, vil
no has llorado ni la mitad que ellos.
Perdón, soy nadie tomando de ti.
Flagelar el alma tiene plenitud.
Aquí esta.
Ahora: ¿caíste?
Ves un punto.
Te imanta y visualizas.
¿Te diste cuenta?
Es eso.
Nada

Marcela somoza

Tengo un racimo
de momentos que se pierden
en la alas transparentes
de las manos
que pueblan la vida
hasta la misma muerte.

Sebastián Puzer

dejaré que pose mi cadáver entre las nubes del rio,
y mi alma se esconda en la humedad de tus labios,
persistiré entre las aguas del ocaso,
y sentiré el grito voraz del silencio,
entre multitudes de nada,
y abrazos de la muerte con sus brazos de algodón,
y veré la luz del alba hecha triza en el viento,
y al fin seguiré siendo,
la inmortalidad misma.

Silvia Patón Cordero

Orgulloso afán


Orgulloso afán
el de los veinte años
que rápido pasa
y rápido se lleva
las ilusiones.
¡Pero cuánto desearíamos
volver a él!
Orgulloso afán
e ímpetu
el de la juventud
que arrostra los hechos
como un vendaval impetuoso
y sólo nos deja
amargas cenizas
en un porvenir incierto.
¡Orgulloso afán
de años pasados
y de sueños muertos!

Carmen Gómez Menéndez

PAZ


Llevo el alma cosida de remiendos,
velamen de pergaminos medievales,
cansado de travesías en galernas.

Dónde encontrar la paz de aquélla primera visión,
imagen que nos obliga a crear día a día,
la palabra esperanza...
vana quimera,
donde se alimentan los fantasmas,
cada noche...

Y, es ahora,
cuando traspasé las barreras de absurdos despertares,
que busco el descanso merecido,
sobre el dulce regazo de un amor inventado.

Antonio Macera

De pronto la felicidad me roba los ojos,
de pronto todo se vuelve de miel y de luna,
sin embargo vive en mí una melancolía,
un tristeza que se acumula como una cicatriz;

...un dolor que estira sus números grises,
un arrebato que muerde mis días,
el círculo morado de mi respiración,
y el nudo que en mi rodilla se desata.

graciela wencelblat

Bordé la penumbra
con hilos de colores,
ilusión de creer
que la rosa derramaría
su centro luminoso
o el pájaro dejaría azules centelleos.
Cuando el tiempo duele hondo
no hay que adornarlo
sí volver a empezar.

No se borra la historia con balbuceos.

Juan Carlos Céspedes Acosta

Ciudadano


Yo conozco la voz apagada
que recorre las calles de mi ciudad
Las manos rotas del rezo de los vencidos
Los pies desgastados por las escaleras
que sólo conducen hacía abajo

Yo conozco bien al niño muerto
enterrado con voces de protesta
Los pájaros calcinados por el fuego
El fogón vacío pudriendo la casa

Yo me conozco machacado
como la uva escupiendo mosto
Traspasado por la evidencia
de tanta lucidez atornillada a las pupilas.




MEMORIA CONTRA EL OLVIDO



A Víctor Jara, una voz que no cesa.

Sé que tus manos
Se hicieron pájaros antes de la muerte

No supo el verdugo
Lo imposible que fue matarte
Los asesinos no saben
Que los cantores no necesitan la voz
Cuando el pueblo los canta

Dicen que en el estadio de Santiago
Por las noches se escucha tu voz
Cantando “Te recuerdo Amanda”
Y una bandada de aplausos
Cruza la noche oscura buscando el alma.




PARQUENOCHE



Parque criatura dos cabezas
Ninguna noche de luna
Fósforo encendido cadáver de cigarrillo
Techo del árbol con todo y nido
Espía de la niebla y la basura
Música de dientes y frío
Criatura dos cabezas bajo lluvia
Con agua espero bajo alar
Reloj descalzo mi porción de soledad.



SALA Nº 3

Subo las escaleras y
vienen abrazos de años separados
mientras acostado al ojo prevenido
padre yaces eternidad
con ese olor que se pega a las ropas
y nos siembra el luto
Sequía en los ojos ya desde adentro
donde flotan flores arrojadas al abismo
Suelto tus manos habitación de hospital verde lejía
noches que nadie podrá borrar
Ojos cansados mi cortina de gente
y tú y yo solos con la muerte y con la vida.

TOTO DEL ABASTO

Barney se sacó la careta
(la cabeza en realidad)
en el baño del estacionamiento
y mi hija se diò cuenta demasiado rápido
del truco sucio de la magia cotidiana
Después caminamos por las mismas
calles de siempre, tomados de la mano,
sin hablar.
Ella saluda a los manequin
que venden los judíos
rojos, verdes, blancos
“Frío” me dice…
quiere decirme que tienen frío
Están desnudos, su plástico al descubierto
Estamos desnudos aquí los dos
mi hija y yo
caminando por las veredas
ella entrando en la magia despacio
y yo saliendo de ella sin retorno





Todo se sostiene de un hilo
un delgado hilo
que bailota con el viento
la danza de la muerte
Todo pende de un hilo
desde tu comida de mañana por la mañana
hasta el amor que te prodiga
tu dulce conejito
por tres pases de cocaína
Todo pende de un hilo
Y todos lo saben
tratan de esconderlo bajo la almohada
pero están están asustados
bajo la luz del sol
Bajaste de la cruz
desclavando clavo a clavo
primero los pies
luego las manos
y así rojo de sangre
entraste en Tranformation
barrio del Abasto
y quedaste ahí
sin poder hablar
sin poder explotar
ni calmarte
Luego de varias horas
te fuiste con dos travestis
a La Recoleta
a tomar whisky sentado bajo el sol
mientras las viejas toman té
y se te hizo el mediodía sobre el calvario
y a tus compañeros
les aflora la primera barba
y vos tenes una inmensas ganas
de matar a todos y a todo
pero ni siquiera podes
pensar demasiado bien
la próxima frase que vas decir





Una triste mañana de agosto decidió irse
Quien sabe porque….
Quien puede saberlo
Tal extrañaba a los que ya habían partido
a los que se fueron antes que el
Se calzó su mejor saco
y decidió ir a buscarlos sin avisar
Tal vez la explicación sea mucho más simple
No la se
Alguna vez lo conocí
de la noche
Escucho la noticia de boca
del locutor radial
vía Internet, desde otra ciudad
Santa rosa llegó
Levanto a mi hija
para llevarla al jardín
leo el diario
y dice lo mismo que dijo ayer..
miro a través de la ventana
tomo un mate, pongo un blues
todo sigue bastante oscuro
y ya son más de las 10





Las luces llegaban de lejos,
eran miles y miles de luces
cabalgando en mi cerebro,
los jinetes espoleaban
sus caballos negros
y yo estaba solo
y seco.
Luego crucé la calle
y vomité en un jardín de amapolas
muertas
que nacieron para estar ahí,
en mi camino,
una más en el camino,
todas quedan
y son casi como
una vieja película de amor
en blanco y negro
en la matinée del domingo.
La Recoba de la estación me encontraba
con los sonámbulos del barrio
sentados en sus mesas,
vino tinto
recuerdos
y miseria
estrellas que se apagan lentamente
en el cielo,
despacio.....
despacio.....
viejas estrellas
de viejas galaxias
ya olvidadas
fuera de la mira de cualquier telescopio
historias de amores
olvidados
en una pensión
o en la provincia
o en el infierno,
amores bajo la tierra
que al fin es nuestra herencia.
Todo es un juego rabioso
donde siempre gana la muerte,
ella como reina del mundo,
siempre acariciándome
cuando bajo tambaleante
por las veredas.




Amargados
porque nuestros héroes están muertos
desconcertados
porque los bandos se han mezclado
en un triste juego de simulación
y el enemigo esta en tu minestrón
y en cada cucharada se vuelve parte del todo
Sombríos, en estos bares por las noches
masticando ravioles de tres pesos
como perros
sin levantar la vista,
las cabezas muy cerca del plato
observándonos de vez en cuando ,
en silencio
observando de reojo la TV
donde las putas de la dictadura
devenidas en estrellas
nos gritan como tenemos que vivir,
lo que hoy tenemos que comprar.
bandejitas de arte contemporáneo
en la heladera del supermercado
Tres jóvenes promesas del rock
nos vendieron a todos (a la primera cachetada)
y es la única puta verdad de la prensa de hoy
y ese viejo abismo negro sobre tu cabeza
todas las noches
ríe a carcajadas
de tu lenta capitulación
Locos, delirados, sin remedio
mis amigos fumando base
pelados, sin dientes, locos,
perforados,
los sueños rotos, locos, desesperados
muriendo en baldíos, pensiones mugrientas
sucios hospitales
el sueño terminado
aturdidos, sin decisión
engañados
cinco mil años de historia tirados a la basura
entre iglesias, mezquitas y
manos equivocadas,
y a pesar de todo pesar
una flor crece dentro de mi balcón
y aunque es de vidrio, no deja de ser,
y algunas flores crecen aquí al sur
empecinadas y rebeldes
entre tanto Realty show
en las calles de la ciudad
A esta hora,
las chicas guiñan en la esquina
suben a los autos
y viajan ciegas en la noche
y ese inmenso agujero negro
sobre sus cabezas
ríe a carcajadas de sus pretensiones

Milagros Rodríguez

Encapsulado mar


Con mi esencia. Iluminada apenas
despojada de toda levadura
caigo
en la hondura piadosa del sol de los ciegos


Contra nada me abismo
y presiento
un alma anegada y oscura
Encapsulado mar
¿Soy yo
o eres tú?
diminuta memoria de racimo


Siento tu rodar
tu prisión marina
Moléculas y átomos conjurando la caída
¿Qué somos?
sino el mismo canto de tu semilla
o la sangre del cordero
¿Qué somos?
sino desnudez vegetal
penetrando al templo de los marfiles


Abracemos una sangre contra otra
“y hagamos fuego y silencio y sonido
y ardamos y callemos y campanas”

Anita Montrosis

Dime amor ¿cuándo vuelves?


Chile es un país de montajes, cuerpos al mar
y un atuendo negro recién planchado
¡dime que haremos ahora!
dime si los ojos pueblan una copa
o solo pueden abrirse para cerrar un beso
dime amor ¿cuándo vuelves?
¿Cuándo comienzas a abandonar la ciudad?
donde lo invisible se descuelga aledaño
y vuelve a frecuentar sus efigies
como si la memoria fuera inmortal
Tengo rabia amor
ellos han extirpado todas las raíces
mi vientre reclama a sus antepasados
y llora el nacimiento de esta fábula
explotada hasta el delirio
Vendan todo ¡malditos! Vendan todo
menos los sueños de nuestros niños
porque cada rió, cada bosque
cada montaña es parte de esta tierra
que no ha dejado de ser joven.
Te decía amor ¿cuando vuelves?
cuando vienes a buscarme


Intente olvidarte, pero aquí estoy
exageradamente poética
dialogando en la textura de unas sabanas
extraviada por aquel perfume que se abandona
cuando la mañana se registra a pestañazos
Sabías que la muerte traspasó las habitaciones
y que el otoño nos instigo a enamorar fantasmas
yo bailo con duendes fugaces
porque me deleita enfurecer a los ángeles
pero el cielo reclama a Laura estacionaria
y a mi contrapuesta.

Gustavo Tisocco

Amo a un hombre pez...


Amo a un hombre pez,
un hombre marino,
acuático como las algas, como la sal.

Habita en las profundidades oscuras de todos los naufragios,
a veces llora
terriblemente solo allá abajo,
en otras baila en salones transparentes, torrentosos.

Yo amo a ese hombre pez
de cuerpo brillante/filoso,
de un mirar constante/horizontal.
Un hombre que me cuenta eternas leyendas,
que me canta con su voz de espuma
y me abraza como puede.

Yo amo a un hombre pez
y soy hombre terrestre.

Me condena la asfixia.
Lo condena mi aire, mi mundo de pájaros,
mi universo de redes, de anzuelos.

Me mira desde la superficie apenas sumergido
lo miro desde mi oxígeno
al límite extremo del ahogo
y nos besamos apenas un instante,
ínfima eternidad habitando en la apnea.

Elisabet Cincotta

PLENITUD


desnuda se desliza
sobre el tiempo
finitud abstracta
que se mide desde el ser
en la penumbra

nueve lunas vestirán
de calidez el cuerpo

ella/ permanece
abrazada a la instancia
del futuro
extensión
de sus fluidos

mientras su luz se mueve
y el vientre germina vida

Carmen Gómez Menéndez

BENDICIÓN


Bendigo tu nombre,
bordón de guitarra,
acorde rojo de labios,
cuando te pronuncio.

Tu nombre,
agua bendita
para mi mente quebrada,
repique de castañuelas,
en la copla triste
de un amor gitano.

Y digo tu nombre
y suenan las campanas
y baten sus alas las aves,
aire de abanico tu nombre,
baile mediterráneo,
emigrante sin papeles
en esta mi tierra prestada...

Tu nombre...

Bendigo tu nombre
y no recuerdo el camino recorrido,
y me pierdo,
y no se volver, por no querer volver,
a lo que no existía sin tu nombre.

Bendito seas,
bendito sea tu nombre.

Norma Estuard

yo fui de todas...tal vez...


...Yo fui de todas tal vez la más blanda y sumisa
la que trajo en el vino de su dolor, la pena
la que cuidó tu barca varada en tibia arena
la que no esperó nada, tan solo una sonrisa.
...
La que en noches de olvido vio quebrar sus amores
cuando un navío intruso, navegabas seguro
la que cubrió de rosas tu casa de anchos muros
y apagó en su regazo tus hondos sinsabores.
...
La que trajo del centro de su amor la esperanza
una pluma blandiendo como temblor, de lanza
y por capa una alondra con un suave reverso...
...
Un plumón por sombrero, de faisán azulado
un beso de su boca temblando enamorado
y en el puño el pimpollo perfumado de un verso.

Gloria Eugenia Lemus.

ADHERIDA A TU VIDA


Hombre de mis Comarcas.
¿Como no habría de hacerlo?
si asociarse a tu vida es...
... ¡adjudicarse el cielo!
es, vencerle la batalla a la tristeza
es, arrancar de tajo el desamor.
Es ser... libélula en tu aire
es seducir al tiempo
es serpentear las olas
en mar de caracolas
donde mi ser gozoso
por ti ha de aguardar.
Y luego allí...
... en ese, tu mar embravecido
como una gata en celo
con grito en desespero
mi aullido has de escuchar.
Tú... tú, sentirás mis ganas
en contoneo de un cuerpo
que en frenesí violento
con furia y sin lamento
en éxtasis divino.
¡Tu nombre exclamará!

Carlos Barbarito

Bebe lo que hay de luz en la penumbra...


Bebe lo que hay de luz en la penumbra.
Come panes de aserrín, de ceniza
mientras oye caer, en un agua remota,
otro imperio, una estrella.
Pude ser fecundo -piensa-;
pudo el mundo sostenerse
por si mismo en el vacío perfecto,
pero se apoya, por cansancio,
sobre un cansado elefante.
Pudo ser fecundo,
lustral, exacto, propicio,
aireado, expresivo,
voz en el centro del coro,
perfil nítido, hasta miel púrpura,
oleaje profundo, oro.
Encuentra alivio, un poco.
En un hueco cálido donde cabe,
por un momento, apretado,
como un nonato, contra si mismo.

Manuel Ramos Martínez

Cuando Regrese Morena


Cuando regrese
a mi espacio robado
al ultrajado
a mi pueblo de ayer y de hoy
quiero verte morena
quiero verte en el valle
que regamos juntos
en lágrimas de despedida

Cuando regrese
quiero verte morena
quiero verte
en las calles de ayer
a tus ojos de uvas
a tu cuerpo guitarra
morena
y tu paso de gacela

Cuando regrese morena
cuando regrese
a mi espacio robado
al ultrajado
a mi pueblo de ayer y de hoy
quiero escuchar
morena
tu canto melodía
a tu voz
y a tu risa catarata

Cuando regrese morena
cuando regrese
a mi espacio ultrajado
quiero pintarte
pintarte
cuando regrese
morena
a mi espacio robado
¡quiero pintar en tu cuerpo
el hijo robado!.

Valeria Counyo

Domingo (catarsis)


Lento el domingo me amanece... lento mi cuerpo recuerda que es cuerpo.
Tengo la sensación de los no días pasados, de las noches que se me estrellaron en el pecho.
Tengo vagos recuerdos que se me confunden.
Mis pies parecen quejarse, pero siguen caminando.
Siento el olor de los abrazos.
Dibujo en mi sonrisa las sonrisas que regale y me regalaron.
Paso por alto el olor del dolor.
Me da nauseas.
Prefiero evitarlo.
Escucho todavía mi voz rebotando... y rebotando...
Ando rumiando todavía ese beso... que amanecido de excesos y confesiones me diste.
Tengo la imagen de volver a casa... una y mil veces.
Mi cama que se abre. Mi gato que me desconoce.
Lento el domingo me regala la calma... de lo vivido.

SILSH

ELEGIR PALABRAS


Me duelen las palabras
en orden-parejitas
las que engarzan sus signos
precisos-relojeros
con su filantropía.
Esas palabras-huecas
sonajeros de cocos
en sus latas vacías
de rebuzno encerrado
en botellas al mar.

Prefiero la palabracompañera
entre manos repletas de latidos
prisioneros de utópicas postales
que estrellan sobre el rostro
sus palabraspalomas
las que callan el nombre
del túnel
que bifurca el equilibrio

las que buscan-extienden
trabajan-se suicidan
alimentan la voz
gastada por la lucha
de este oficio de
ser
bajo un manto piadoso
de palabrasfuturo

las de frágil
porcelana sin cocer
el pan para reunirnos
en palabrasemilla.

Laura Garcia del Castaño

De pie, a metros de tu olvido


Giraste
como otra amante de Lot,
una virgen
asaltada por su propio milagro
arrullada por la voz de su demonio.

la duda es el vicio
de mirar hacia atrás
justo ahí,
sobre la hora,
en el borde.

Tu presente no ha sido suficiente
Ese vestido
cosido a mano
con espejismo y dolor
con sorpresa y dolor
adornado con piedras y cautiverio
con falsas transparencias y vidrios rotos
no ha cubierto nada.

Los recuerdos son parte de una disciplina
de rozar
con su apenas muerta presencia de vivir.
el amuleto para tu desdichada suerte
la joya que te deslució durante toda la fiesta

un solo recuerdo bastó
corrió al costado de los gestos diarios
y las débiles posturas (como un túnel secreto)
corrió y cavó hasta tocar tu nacimiento

un camino oscuro que ha encendido de pronto una lámpara
para encandilar tus harapos de princesa rota
para fotografiar (el orden con que disponías la risa,
separabas el hambre
controlabas el celo
moderabas el llanto
educabas la voracidad de tu sexo)

y dejar un negativo extraño
de lo que corría debajo,
tu propia lava fantasmal,
la que noche a noche perseveró en su fuerza
rebalsó de su molde
y salió
justo ahí,
en el borde
sobre la hora
en que giraste

Para quedar inmóvil
estatua de barro
incierta como un cordero clavado ante el fuego
de una casa,
sin puertas ni ventanas
pero con un inmenso jardín
de flores puestas a igual distancia,
la misma exacta simetría de su compasión.

No tienes huída ni vuelta atrás
El ayer es
toda la fe con que te enlaza el porvenir
A tí, última mujer de Lot,
virgen sin el milagro del olvido.

Daniel Requelme

ESPEJISMO


Antes
del desgarro
impensable tu partida
las cosas que tocamos
fundaron el mundo.

Ahora
complicado todo
se desvanece
se repite
tu voz.

Un espejismo
con atavío de ángel.

Todo
coagulado
en la memoria.

Juan Ricardo Sagardía "SANTOAMOR"

ARRIESGAR


Nosotros los que emprendimos
la caminata en la aurora,
podríamos disfrazarnos
de incomparables flores
y aun así el uniforme
saldría sin imperfección,

Nosotros que bailamos
millares de danzas,
transferimos a la fuente
milenios perennes,
sabiendo que podría
romperse el beso de cristal.

Nosotros arriesgamos
porque queremos permanecer
sin ser parte del viento.