Daniela Alejandra

im-paz II


Escribo para que la muerte
no tenga la última palabra.
Odysseus Elytis




Cuándo callaran mis voces.
Cuándo huir de mí.
Duele el frío, las lágrimas
que no cicatrizan este latir.

Dónde morir
llevándomelo todo.
Dónde ser
en esta extraña piel.

Si soy Ariadna
también el minotauro
desterrando el laberinto
que habita en mí.

No perdono a la vida.
ni a Alejandra.
No perdono a las hojas
ni a Daniela.

No perdono a los poemas
que más que silencios
fueron pájaros enjaulados.

No perdono
estos ojos ciegos.
Y entre tanto mirar
seguir.

Noche! Virgen negra
que estas en los cielos;
intercede por mí.