Oscar Perdigón

Ella


pulsa mis heridas
me transfiere la polinización
de sus besos
llega envuelta en sus deseos
atraviesa mis pensamientos
juega con su sonrisa y su lencería
y me dice
¿acaso todo el mundo ha esterilizado
la mirada?
finalmente pienso que ella
arrastra tanta calma
con la vehemencia de una gata
se acerca a mí
y acaricia el contorno de mis ojos
aparta las esporas del miedo
con sus centros gravitacionales
ella guarda cada instante
en envoltorios de caramelos