María Eugenia Caseiro

Apasionamientos


Apasionados crecen los colores de la flor,
los días del verano, la crisálida que rompe
la vejiga y desenvuelve un par de alas.
Apasionada luz que viste blanco lino
y reluciente, se acomoda en el altar del día.
Apasionado el canto del jilguero en la mañana,
el lirio que se abrió de piernas sin pudor
para que el zángano de incendiada aguja
penetre el secreto de su cáliz...
También apasionado bulle en la tetera el néctar
que alivia la garganta del frío vientecillo
que el invierno ha criado como a un hijo
y hoy apasionado escapa de su seno
para posarse en la piel... apasionada.