Eso se llama amar, RICARDO GALLEGO, CUBA





Por vez primera, en el camino,
nos vimos, nos pensamos,
nos desciframos, pactamos,
entonces, así, empezó el amor.


Cuando te hablaba y tú escuchabas,
palabra por palabra,
con toda la entonación,
con toda la rima,
eso era, compromiso.

Si te pedía, con los ojos,
que vinieras a mí, y tú,
llegabas con toda tu vida,
con toda tu suerte,
eso era, derroche.

Mencionar tu nombre, y tú,
vulnerable y atenta, y tú,
opulenta, delirante y atrevida,
me mirabas con la piel petrificada,
eso era, seducción.

Cuando en mi pecho, tú,
declinabas tu cabeza y tu mente,
te desnudabas de ropas y de piel,
y palpitaban mis pensamientos,
eso era, magia.

Si en cada acto de frenesí y éxtasis, tú y solo tú,
galopabas desbocada, amenazadora, inquietante,
y yo, solo yo, descifraba tus secretos, rompía las reglas,
mejoraba tus instintos de mujer,
y los dos, solos los dos,
agonizábamos y coexistíamos,
eso, eso solamente podía ser
amor