EL ECO, Francisca Huppertz, México

Del otro lado del eco
Hay la pared salvada
Una luz que trasciende
Algunos la llaman “paraíso”
Esta necesidad de decir, de escribir
como antes de tomar una foto
para un día poder acordarse
¿Que eso no existe más?
Hay que aprender a adelantar con palabras
Arrastrarlas consigo y seguirlas
Precederlas y dejarlas guiarnos
Como el vaivén siempre recomenzado
De las olas del mar.